viernes, 30 de agosto de 2013

Ojos lejanos

Título: Ojos Lejanos
Autora: Kathleen Valencia


OJOS LEJANOS
TAN CERCANOS A LOS MÍOS,
MI COMPLEMENTO, MI DEBILIDAD.

PRESENCIA CALORÍFICA
TAN AUSENTE, OMNIPOTENTE,
UNA OLA DE TRANQUILIDAD.

ME BUSCAN, LOS ENCUENTRO,
ME SEDUCEN, Y LOS FRECUENTO,
Y DE REPENTE SE VAN.

SUS OJOS SE MARCHAN,
Y EN LA DISTANCIA,
MI REFLEJO EN ELLOS.
LOS MÍOS SEDIENTOS
OTRA VEZ EN ESPERA DE SU REGRESO.

AMOR MÍO,
NO VUELES TAN LEJOS. 
                     -Kathleen Valencia

miércoles, 28 de agosto de 2013

Muerte

Título: Muerte
Autor: Jose Antonio Prieto


 

¡Oye pequeño cuervo!
No tengas miedo,
a la muerte no se le teme,
yo sé que sufres y que tienes miedo
pero nada va a pasar.

Esto nada más es momentáneo,
 Instantáneo e indoloro.

La vida es una desgracia,
es mejor la muerte,
te lo digo en serio.

Creerás que la vida tiene algo especial para ti
pero no es cierto; vivimos engañados.

                                             - José Antonio Tatay Prieto.

martes, 27 de agosto de 2013

Adiós

Título: Adiós
Autor: Hirassel Villarino



Adiós.
La palabra más corta, simple, fría y trágica que conozco,

no solo por su significado si no por todo lo que implica nombrarla
Implica renuncia, rendición, abandono y tristeza. Sin duda es una de las palabras
más tristes que existen y sin más preámbulos y la que más odio.


La palabra adiós no es divertida, su significado
no la hace divertida, la hace aburrida…y suele provocar en las personas sentimiento de abandono, púes ya no hay nada después de decirl.

Por otra parte la palaba “hasta pronto” es divertida, mágica, 
ideal para dos personas que se acaban de conocer, que se conocen o 
que desean volverse a ver. Implica ganas, sí ganas de reencontrarse y 
de crear una historia juntos, una maravillosa y mágica historia
 que puede o no tener un final feliz. 

Yo solo digo para que decir adiós, si puedes decir hasta pronto
 y en lugar de crear tristeza crear felicidad.

                                -Hirassel Villarino

martes, 13 de agosto de 2013

"."

Título: "."
Autora: Aura García



Podría pintarte con palabras,
definiendo tu silueta no con grafito sino con estrofas,
podría bien decir que en tus ojos vive la luna
y que la noche te cubre de anhelos,
que la suavidad del recuerdo se queda corta en tu piel,
y que en tus labios se saborea el fuego,
que el descanso en tú lecho sólo hoy se ha de encontrar.

Podría dibujar entre vocales y consonantes tu existencia,
y culparia a la demencia que ronda entre sentires de estas ansias,
de tenerte y no tenerte, de quererte y luego no,
podría navegar en el caos de la duda, ese que se cuela
entre suspiros cada que te dejo; ¿te tengo o no te tengo?
¿te quiero o no te quiero?, saboreando la dulzura de la indefinición.

Podría tocarte con mi pluma y jugar al escondite con el tiempo,
rozaria tu pudor, rozariamos el cielo, anclando en tus caderas la
espera eterna, jugando con los miedos, jugando con las dichas;
descifrando los silencios que bailan en tus labios, besandote la ausencia,
durmiendo en tus brazos.

Podría jugar a ser poeta y escribirte cien sonetos,
pretender ser Neruda y bajarte hasta el cielo,
pero este día no me alcanzan las palabras y los sentidos son inquietos,
dejémoslo para mañana y hoy sólo tomemonos en silencio.

-Aura G.

viernes, 9 de agosto de 2013

La tribu

Título: La tribu
Autor: Jorge Valenzuela


LA TRIBU

Y aquí estamos, mirándonos unos a otros, conteniendo risas que podrían ser muy escandalosas, burlándonos del profesor Odioso, que se empeña en que aprendamos lo que es un círculo, por lo menos.  

Nadie faltó hoy a clases, la tribu está completa. Tres semestres ya, la mitad del camino diría el profe de lectura, con eso de que es tan sensible, seguramente hasta se le saldrían las lágrimas al decir que ya somos muchachos grandes, pero que aún nos falta camino por andar y otro tanto de estupideces románticas de las que nos burlaríamos tal y como lo hacemos ahora con el profe de geometría.    

Tres semestres y seguimos todos aquí, en esta escuelucha que no olvidaremos, en especial aquellos lugares que son muy cómodos para los arrumacos, como detrás del laboratorio de física, donde las parejitas comienzan con un intercambio de fluidos y caricias que llegan a ser muy excitantes; lugares en los que nos peleamos más de una vez (y las que faltan), en los que nos reímos, lloramos, jugamos, corremos, gritamos, bailamos, cantamos; lugares en los que se ha ido formando poco a poco nuestra historia, la historia que sólo nosotros sabemos y que contaremos una y otra vez, hasta que nos hartemos.  

Caídas, golpes, fracturas, lágrimas, mocos, baba; contaremos todos esos accidentes que hemos tenido; besos, cachetadas, pellizcos, caricias, lamidas; platicaremos de esas novias inquietas a las que tanto quisimos; corajes, insultos, peleas, madrazos, patadas, aruñones, jaladas de cabello; recordaremos todas las peleas que tuvimos con esos tipos que terminaron siendo nuestros mejores amigos; albures, mentadas de madre, consejos, regaños; tal vez lloremos al recordar las palabras de nuestros compañeros.    

Así que aquí estamos, los enfadosos, los gritones, los chistosos; males necesarios para que la convivencia no sea tan aburrida; los enojones, los aburridos, los llorones; ¿qué podemos hacer? siempre habrá alguien; los macheteros, los listos, los presumidos, los inocentes (que son muy pocos), los vulgares; todos mirando al profe y esperando a que alguien haga la pregunta.   De pronto ahí está, el valiente alza la voz y dice: "Profe, ¿cómo se dice, váyansen o váyanse?"  

-Jorge Valenzuela 

jueves, 8 de agosto de 2013

Muerte a la rima

Título: Muerte a la rima
Autor: Jack Vane

Muerte a la rima...

Muerte a la rima de tus ojos
verdes como la mentira
y ciertos como el sol.


Muerte a la prosa que triste cuenta
lo que los vasos callan al vaciarse.


Muerte al ventilador espía 
colado en nuestro cuarto.


Muerte a la metáfora oculta
en lo que oculta tu sostén.


Muerte al amor en mi mesa
de ligeros cristales.


Muerte a la rítmica y al compás
hasta que me regrese la pasión


Con estas palabras juro jamas volver a rimar.


Y enterrados queden,
rima y corazón
si no alicatas mis paredes
de un poco de amor.


Mierda.

-Jack-